Ayer comenzó nuestro curso online
Coeducación y competencia socioemocional. Afecto y relaciones. Este verano, durante la preparación del mismo, surgió un tema en la conversación
entre las dos personas que llevan a cabo la tutoría María José,
Juan y yo como coordinador.
Muchos cursos que planteamos sobre el
tema tienen buena acogida y una valoración alta entre quienes
participan. Se genera incluso una dinámica interesante de trabajo y
colaboración. No obstante, una vez acaban, es complicado, por la
propia dinámica personal y laboral, retomar el contacto y avanzar,
llevar a cabo una verdadera formación continua. Hablamos del papel
de las redes sociales a la hora de unir estos intereses y propiciar
un espacio de encuentro más allá de la duración del curso en sí.
Probablemente la idea tenga que madurar más para ofrecer una
propuesta interesante y atractiva pero no dejo de pensar en su
necesidad.
Son varias las iniciativas que podrían
ejemplificar esta posibilidad de aprovechamiento de las redes para
una formación más permanente sobre coeducación. De hecho, como
CEFIRE seguimos grupos y personas en Twitter y Facebook de los que
aprendemos todos los días.
Algunos ejemplos son COE-PAZ
(https://www.facebook.com/groups/111339492299888/)
o Docentes por la igualdad
(https://www.facebook.com/groups/docentesporlaigualdad/)
o Rompe el silencio contra la violencia hacia las mujeres
(https://www.facebook.com/groups/118940064803059/).
Entre las diversas iniciativas
coeducativas que surgen apoyadas en las redes sociales, nos gustaría
destacar hoy otra de la que hemos tenido noticia más recientemente
pero con un enorme potencial, no solo por el número de participantes
sino por la experiencia y el buen hacer que aportan. Se trata de
Claustro virtual de coeducación
(https://www.facebook.com/groups/526805410766086/),
un grupo en el que docentes de diversa procedencia comparten
materiales, ideas, información, experiencias propias y ajenas acerca
de la actualidad coeducativa.
La presencia de todos estos auténticos
“claustros virtuales coeducativos” es hoy por hoy un instrumento
muy aprovechable de formación e interacción. Quizás no haga falta
inventar nuevos grupos, como debatíamos a la hora de preparar el
curso. Tal vez existan bastantes herramientas, aunque no
suficientemente conocidas, para participar con otras y otros docentes
de una tarea que nos ha de comprometer en nuestra labor cotidiana,
como profesionales y como personas.
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